Por Juan Soñora y Luca Giorno
Andrés Camacho es futbolista de Flandria, club que actualmente milita en la Primera B. En 2025, el defensor cumplirá su decimotercera temporada en el plantel profesional del Canario, donde se formó deportivamente y el único equipo donde jugó. En este tiempo, sufrió la inundación del Estadio Carlos V en dos ocasiones, descendió de categoría en tres y fue campeón la misma cantidad de veces. Hoy, siendo uno de los capitanes del equipo, analiza cómo fue cambiando la cobertura mediática del ascenso y también de la institución de Jáuregui, una localidad ubicada a más de ochenta kilómetros de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
-¿Cuál es la primera noticia que recordás haber visto en un medio “grande” sobre Flandria?
-El ascenso al Nacional B, en 2016, que fue contra Atlanta. Fue por lejos el caso más visto y hablado porque era en la cancha de ellos, había un montón de periodistas y justo el fútbol de Primera ya había terminado: solo quedaba por jugarse ese partido.
-¿Creés que fue tapa por haber sido el primer ascenso en su historia a la Primera Nacional o por haber vencido a un histórico como Atlanta?
-Claramente se habló más de que no ascendió Atlanta que de un hecho histórico nuestro. Ellos tenían la fiesta preparada, que si ganaban, ascendían, y la noticia era más esa que el mérito propio. Incluso, previo a campeonar y siendo ya punteros del campeonato, comprábamos el Diario Olé para vernos y no aparecíamos. En Crónica si, de vez en cuando. Todavía tengo un par de recortes guardados.
-Otro gran hecho fue el invicto de 17 partidos en esa categoría. ¿Considerás que le dieron la relevancia que merecía?
-Casi ni se difundió. Cuando nos ganó el Argentinos de Heinze en nuestra cancha, solo hablaron de que ellos se mantuvieron en la punta, no de que le habían ganado al único equipo que estaba invicto en el fútbol argentino. Yo creo que va a quedar como un hito que lo vamos a seguir contando en el pueblo durante años y años, pero en ese momento estábamos haciendo historia en la primera temporada del club en la segunda categoría del ascenso y no se nombraba. También puede ser que, previo a la explosión de las redes sociales, era más difícil el seguimiento de estos datos para los que no seguían nuestra campaña de cerca.
-Los equipos metropolitanos ven el viaje a Jáuregui como una travesía por la distancia, ¿Los medios también lo ven así?
-Puede ser. La llegada de los medios es poca. Quizás hay clubes que son de Capital, como Excursionistas por dar un ejemplo, que ascendió este año y lo transmiten todos los fines de semana. Nosotros estamos hace décadas en la categoría y uno se pregunta por qué no vienen acá. Desconozco si es por comodidad o costos, pero fuimos de los clubes que menos transmitieron durante el año y, de hecho, los únicos que nos pasaron por cable fueron en condición de visitante. En la actualidad, podemos rescatar algo positivo, que es la plataforma de TyC Sports Play: con eso te asegurás que los hinchas puedan vernos a pesar de no poder viajar a las otras canchas.
-Ya dejando el caso puntual de Flandria y generalizando en el Ascenso, en la época que vos debutaste se dieron los descensos de dos grandes como River e Independiente, ¿cambió la forma de comunicar el ascenso desde ese momento?
-Sí, me acuerdo de que también estaban Rosario Central y Huracán. Si bien creo que la Primera Nacional siempre fue muy federal, en ese momento se hizo mucho más fuerte en cuanto a nombres. Hoy hay muchos clubes repartidos por las provincias que son muy populares también, entonces se mantuvo esta idea de seguir a los clubes gracias a las redes sociales y los periodistas independientes. Quizás estos años que volvimos a la B Metro se perdió un poco la llegada por la cantidad de equipos: antes había 60 equipos entre Primera, Primera Nacional y Primera Metropolitana. Hoy tenés esa cantidad solo entre las dos principales.
-Pensando en la información que replican los medios grandes sobre estas categorías, ¿creés que el ascenso es más relatado por lo extra futbolístico que por lo deportivo?
-Totalmente. A nosotros nos tocó de cerca con la inundación de 2015, ahí fuimos tapa de diario por primera vez, ja. Se suele hablar más de lo polémico o lo raro que del mérito. Tengo un recuerdo de cuando aún no era jugador que, en un partido televisado, le tuvieron que pedir la camiseta a un hincha porque se le había roto a uno de Flandria y eso salió en todos lados. O cuando tuvieron que dibujar el número de una camiseta con un fibrón. Esas cosas las destacan, pero no te dan a conocer el invicto que hablábamos hoy. Hay muchas cosas que son similares a los clubes de Primera pero a ellos no se las remarcan, a pesar de que en los clubes de Ascenso hacemos todo a pulmón.