Por Néstor López (*)
Cualquier librería a la que uno entre tiene una oferta tan amplia y tentadora que es imposible salir de ahí sin encontrar un libro atractivo, interesante, que llame la atención. Eso le pasa a todo potencial lector en la librería que sea, pero se multiplica por mil en la Feria del Libro, ese apasionante e ineludible encuentro anual con las futuras lecturas.
Entre las novedades que tienen que ver con el mundo del deporte, recomiendo con mucho entusiasmo Dios salve a Pep, de Martí Perarnau, un libro exquisito sobre los años de Guardiola en el Manchester City contado desde adentro del plantel, que cierra la trilogía del mismo autor sobre el mismo entrenador (Herr Pep y Pep Guardiola la metamorfosis son los anteriores, también muy recomendables). También son imprescindibles Apuntes del Mundial, de Ariel Scher y la biografía de Johan Cruyff que escribió Pablo Vignone para Librofutbol, uno de los stands más atractivos de la feria para los amantes de la buena lectura y este hermoso deporte.
Pero que las novedades no nos tapen los clásicos porque quién no anduvo por ahí. El fútbol a sol y sombra, de Eduardo Galeano, es de lectura casi obligatoria, al igual que Arqueros, ilusionistas y goleadores, de Osvaldo Soriano; La patria transpirada, de Juan Sasturain; El área 18, de Roberto Fontanarrosa; Díganme Ringo, de Ezequiel Fernández Moores; Simpatía por el Diablo, de Juan Tejedor y 100 x 100 Mundiales, de Juan José Panno, por nombrar sólo algunos. Porque la lista es interminable. Tan interminable como la Feria y esa maravillosa oferta que les ofrece a los lectores que pretenden unir dos pasiones tan arraigadas como la lectura y el deporte.
(*) Profesor de Deportea
