Por Juan Cruz Campana, Camila Cloppet, Luciana Gentile y Agustín Povalej
Elon Musk, empresario y magnate, lleva varios meses en negociaciones por la compra de la red social Twitter, que quiere transformar en una herramienta definitiva para la libertad de expresión.
«La libertad de expresión es la base de una democracia que funcione y Twitter es la plaza pública digital donde se debaten asuntos vitales para el bien de la humanidad», publicó Musk en su cuenta de Twitter.
Se entiende el concepto de libertad de expresión como la libertad que toda persona tiene para buscar, recibir y difundir informaciones e ideas, sin consideración de fronteras, de cualquier manera.
Si Elon Musk ofreciera una herramienta libre para que cualquier persona publicara lo que sea, nos encontraríamos en un dilema ético sobre el asunto ya que existe una delgada línea entre la libertad de expresión y el racismo, la discriminación, la homofobia, la misoginia, la xenofobia, la transfobia y más. Un ciudadano podría cruzar la línea y usarla para agredir, usando como escudo el mal entendido.
Otro punto fuerte y problemático de esta herramienta sería la emisión y recepción del mensaje: las teorías de la comunicación nos avisan que existe un ida y vuelta, una reformulación del código. Entonces, ¿cómo haríamos para que la gente no malinterpretara nuestra información, noticia, opinión o pensamiento?
Para un periodista, sería increíble conseguir un medio por el cual expresar sus ideas y publicar el contenido que alguna vez le hayan negado o censurado donde trabaja.
La poderosa herramienta de las redes sociales y, en este caso, Twitter permite a los periodistas poder publicar sus opiniones y notas sin la necesidad de tener un editor que les baje línea. Esto también implica una responsabilidad mayor a la hora de expresarse porque el alcance que tienen las palabras es ilimitado y por ende llega a más personas para su lectura.
La presunta intención de Musk de que Twitter sea una red completamente libre tiene que tener también un contexto legal que ampare, en este caso a los ciudadanos, a poder ejercer sus derechos en este medio si han sido ofendidos. Resulta importante que la red contemple un espacio propicio para que los usuarios puedan rectificar los mensajes de una manera correcta. Ya que el espacio debe brindar las oportunidades para que la rectificación sea efectiva, es decir que debe ser rápida, debe publicarse con el mismo despliegue y deben ofrecerse disculpas sinceras. Esto fomenta el buen uso de la red social.
Si la herramienta funciona correctamente es probable que ella se inserte con más fuerza en la sociedad y, con esto dicho, el marco legal debe empezar a fundarse en las redes sociales y debe poder cumplirse las normativas para que sea efectiva y positiva y no perjudique ningún derecho de los ciudadanos.
Desde sus comienzos, Twitter fue creado con el fin de que los ciudadanos pudieran expresarse libremente compartiendo sus ideas y opiniones con el resto de la comunidad. Con la llegada de las redes sociales y, más precisamente, la aparición de Twitter el derecho a la información fue altamente beneficiado. El público tuvo una nueva forma dónde divulgar sus ideas, informaciones y opiniones más allá de la prensa.
Con la compra, lo que el multimillonario busca, obviamente además de hacer de Twitter un negocio rentable (en la actualidad no lo es), es convertirlo en una nueva mega app al estilo de las chinas TikTok o WeChat pero centrándose en derechos como la libertad de expresión y derecho a la información.
El problema que Musk vio o dijo ver en Twitter es el de las cuentas falsas que aprovechan las libertades que brinda la plataforma para divulgar opiniones que incitan al odio, abuso y violencia además de dar informaciones falsas que alteran el orden público. La prensa informó acerca de esta inquietud del multimillonario a la hora de decidir efectuar la compra de la red social lo que provocó el desplome del 20% en las acciones de Twitter y acusando a Musk de utilizar esto a su favor según la Comisión de Bolsa y Valores (SEC).
Callar opiniones en redes sociales es un conflicto no menor en la sociedad de estos tiempos. La censura sucede hace muchísimo tiempo en los medios (sigue sucediendo) y era algo posible de manejar, ya que alguna autoridad por parte de la prensa puede censurar al periodista. Es tan simple como recortar la nota o darla de baja.
Fuentes consultadas:
Cuaderno de Ética y Deontología profesional, de Héctor Becerra.
Twitter, página oficial. Desmintiendo mitos sobre Twitter
The New York Times Twitter bloqueó a Trump: así se tomó la decisión – The New York Times (nytimes.com)
¿Quién es Elon Musk? ¿Qué empresas posee? La vida del multimillonario detrás de Tesla, SpaceX (y ahora Twitter), de CNN Español (https://cnnespanol.cnn.com/2022/04/25/elon-musk-quien-es-datos-perfil-trax/amp)
THE WASHINGTON POST
https://www.infobae.com/america/wapo/2022/06/16/elon-musk-le-hablo-al-personal-de-twitter-el-que-no-haga-bien-su-trabajo-sera-despedido/
Musk acusó a Twitter de ocultar información y podría retirar la oferta de compra(https://www.pagina12.com.ar/427142-musk-acuso-a-twitter-de-ocultar-informacion-y-podria-retirar#:~:text=La%20novela%20de%20la%20compra,44%20mil%20millones%20de%20d%C3%B3lares.)